Con frecuencia, nos sentimos solos y aislados de un mundo que jamás detiene su marcha. Quizá sea porque vemos lo que nos rodea a través de las etiquetas que tenemos lo que invariablemente nos excluye de ver directamente.
Nos sentimos ofuscados porque siempre estamos eligiendo y comparando nuestra situación actual con la que deseamos tener. Ese tira y afloja introduce conflicto que nos desconecta de esa fuente de vida, por consiguiente lo que atraemos a nuestra vida es aquello que no queremos, pues ahí está nuestro enfoque. Mantener una actitud expectante, sentirse bien ahora, nos sincroniza con esa fuente ilimitada de la vida, la cual derrama amor y abundancia.
Sentirse bien ahora a pesar de las circunstancias no es sencillo, pero es la única forma de vibrar de una forma más elevada, esto garantiza un estado dispuesto a recibir lo que desarrolla en nuestro interior un estado de paz. Sentirse bien ahora es una elección, pues tenemos el poder de hacerlo, ya que sobre lo único que tenemos control es el ahora, el ayer se fue y el futuro es incierto. Hoy eliges y eso reflejará invariablemente lo que vivirás hacia adelante. Sentirse bien ahora es sintonizarse con esa fuente de vida, es agradecer por lo que tenemos, disfrutar la posibilidad de descubrir ilimitadamente cada fragmento de nuestro ser.
El ser ocurre de instante en instante, no habita en el ayer ni vive en el futuro, el ser es ahora y siempre ahora.
CarDa
